Tampico, Tamaulipas.- El cierre de los salones de eventos sociales, de los cuales dependen otras actividades artísticas, va a generar la pérdida de siete mil empleos después que se trata de un sector que halla muy golpeado por las medidas sanitarias que ha venido imponiendo la Secretaría de Salud estatal desde 2020 por la pandemia del Covid-19, es así que exigen un trato igual que restaurantes, hoteles, cafeterías y tiendas comerciales, así lo señaló el empresario de espectáculos Christian Maya Pérez.

Reunidos en uno de los jardines del Espacio Cultural Metropolitano de Tampico, donde al menos se congregaron 160 propietarios y trabajadores de los salones de eventos de la zona conurbada, todos ellos clamaron por una verdadera atención a esta problemática que vienen sufriendo desde hace meses, por tanto, no van a cambiar su exigencia de que el Gobierno del Estado les autorice la apertura el 1 de febrero, cumpliendo con todos los protocolos sanitarios. 

Christian Maya Pérez insistió que los propietarios siempre tuvieron la disposición de instrumentar medidas y protocolos sanitarios para poder aperturar de acuerdo a las instrucciones que recibieron de parte de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, hallándose debidamente capacitados y organizados para coordinar cada uno de los eventos; sin embargo, este nuevo cierre pone el riesgo la subsistencia de siete mil empleos en toda la región, y el cierre permanente de la mitad de los 350 salones de eventos que hay en la zona.

"Llevamos 11 meses en pandemia, fuimos la primera industria en ser cerrada, se satanizó los eventos como los culpables de los contagios, las fiestas, y no es así; lo que se está haciendo con esta industria es prácticamente morir, estamos sobreviviendo, llevamos 11 meses, fuimos los primeros en cerrar y los últimos en ser considerados en reabrir", precisó. 

"Le decimos al gobierno, nosotros no somos el problema, sino que somos parte de la solución, es mejor hacer un evento bien organizado con un mismo universo, con una misma población de gente, que no esté cambiando, y que tengan todos los protocolos para el cuidado de ellos y obviamente de todos los proveedores", completó. 

En este contexto, advirtió que por el cierre que ha prevalecido de salones de eventos sociales se ha dado el fenómeno de las fiestas clandestinas y callejeras donde es claro que no existen medidas sanitarias de ningún tipo, y esto quizá es lo que ha venido generando una ola de contagios, que se suma a los provocados por las fiestas de Navidad y de Año Nuevo, incluso las más recientes por las fiestas de la Epifanía, situación que ahora les castiga a ellos sin tomarse en cuenta que durante las operaciones de los salones sus normas sanitarias se cumplen sin variaciones. 

Acompañado de Norma Luz Mata y de Gerardo Paredes Dueñas, los también organizadores de eventos, directores de orquestas, de grupos musicales, iluministas, meseros, sonidistas, fotografía y videograbación, entre otros, no dan más alternativas al Gobierno del Estado, pues piden abrir sus operaciones con todas las medidas sanitarias a partir del 1 de febrero, haciendo notar que todas sus expresiones son en orden y completamente pacíficas.